Darbuján a Pandrhola

Cuba Drobbyan (Jiri Sovak) es un pobre caballero que tiene una buena esposa (Bela Jurdova) y once hijos. Cuando llega el momento de tener al duodécimo, Cuba decide ir al mundo en busca de un buen padrino para él. Mientras tanto, el anciano se encuentra con Bohas Zahorsky, quien no quiere ser padrino porque no es igualmente justo con todas las personas; rechaza al diablo (Otakar Brousek) y finalmente conoce a la Mujer de la Muerte (Vaclav Lohnisky), a quien elige porque pertenece a todas las personas de manera equitativa. La Mujer de la Muerte establece un tratado con Cuba y le otorga un regalo especial: cuando Cuba la ve cerca de una persona enferma, esa persona muere; si está de pie, el sanador la cura. Cuba lo prueba varias veces, y el regalo de la Muerte funciona. Poco a poco, Cuba se convierte en un respetado y popular sanador del pueblo. El rico y obeso cervecero Pandrhola (Rudolf Hrusinsky), quien siempre se ha negado a ayudar y se ha burlado de Kuba y de todos los pobres mineros locales, es el contrapunto del pobre caballero. Un día, también se enferma. Llama a Cuba, pero este primero se niega porque la Mujer de la Muerte está al pie de la cama. Sin embargo, al final, Cuba acepta ayudar a Pandrhola y lo trata a pesar de que eso infringe el acuerdo con la Mujer de la Muerte: hace que la cama con Pandrhola gire para que la Mujer de la Muerte, que está al pie, se coloque al frente. Pero Pandrhola logra atrapar a Smrtak en un barril de cerveza, lo que hace imposible que algo vivo muera. Esto causa una gran confusión y conmoción en la tierra. Eventualmente, el Caballero de la Muerte sale del barril, Pandrhola emprende su camino con su mortífera guadaña y Kuba pierde definitivamente su regalo.